Alcohol y tabaco un riesgo grave para la salud
El alcohol y el tabaco suponen un grave riesgo para la salud y ambos son dos factores de riesgo para muchas enfermedades que juntos no se suman sino se multiplican, sobre todo si hablamos del cáncer, ocasionando el fallecimiento de millones de personas en el mundo.
Precisamente, un reciente estudio publicado en la revista Lancet menciona que el tabaco y el alcohol, son las principales causas de cáncer en el mundo. Las primeras conclusiones confirman que el tabaco es el primer factor que favorece el cáncer (33,9%), seguido del alcohol (7,4%) en todo el planeta.
La misma investigación también describe que aproximadamente la mitad de los cánceres no son atribuibles a un factor de riesgo determinado, lo que demuestra que la prevención no es suficiente para ganar la batalla al cáncer. Los diagnósticos precoces y los tratamientos eficaces deben ser entonces los otros dos pilares de una política sanitaria inteligente.
Al respecto el Dr. Mauricio León Rivera, director de la Liga Contra el Cáncer, director médico del Centro Detector del Cáncer y Jefe de la Unidad de Mastología de la Clínica Ricardo Palma, señaló que en el Perú el tabaco es la segunda droga más consumida. Más de ocho millones de habitantes han consumido tabaco alguna vez en su vida y casi medio millón de peruanos de entre 19 a 24 años ya tienen este mal hábito.
“El tabaco es responsable de unas 16 mil 700 muertes al año en el Perú, de las cuales el 14 por ciento son varones y 10 % mujeres”, remarcó.
Asimismo, dijo que el consumo de alcohol es factor causal de más de 200 enfermedades, algunos ejemplos son la cirrosis hepática, algunos tipos de cáncer y/o enfermedades cardiovasculares, así como traumatismos derivados de la violencia y/o accidentes de tránsito.
El Dr. Mauricio León precisó que alrededor del 30% de las muertes por cáncer se deben a factores de riesgo que pueden ser modificables, es decir depende de cada uno de nosotros cambiar algunas malas costumbres.
“De esta manera el cáncer puede ser prevenido a través de la adopción de hábitos saludables, que incluye una alimentación balanceada rica en frutas y verduras, mantener un peso adecuado, practicar actividad física regular, no consumir tabaco así como moderar el consumo de alcohol”, finalizó.